La Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE) detuvo este jueves a varios escoltas que formaban parte del equipo de seguridad del presidente municipal de Uruapan, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, asesinado el pasado 1 de noviembre durante un acto público por el Día de Muertos. Las aprehensiones forman parte de las líneas de investigación que buscan esclarecer por completo el ataque.
De acuerdo con autoridades estatales, los guardias fueron detenidos durante un operativo desarrollado en la Casa de la Cultura de Uruapan, donde fueron ubicados tras una serie de diligencias ministeriales. Los elementos fueron trasladados a Morelia para ser presentados ante un juez y declarar sobre su actuación el día del atentado.
La FGE confirmó que los escoltas están siendo investigados por presunto uso excesivo de la fuerza, luego de que dispararan contra el agresor cuando éste ya se encontraba neutralizado, según los primeros peritajes. La institución señaló que estas acciones forman parte del compromiso de “no dejar ningún cabo suelto” en el esclarecimiento del crimen.
El homicidio de Manzo, ocurrido mientras encabezaba un evento público el 1 de noviembre, ha generado una profunda conmoción en Michoacán. El edil había denunciado previamente amenazas y solicitó mayor protección ante el clima de violencia en la región. Su asesinato se suma a una serie de ataques contra autoridades municipales registrados en el estado en los últimos años.
Las investigaciones continúan abiertas y se mantienen otras líneas relacionadas con la autoría intelectual y el contexto del ataque. Se prevé que en las próximas horas la Fiscalía amplíe información sobre la situación jurídica de los escoltas detenidos y los avances del caso.



